Los que me seguís habitualmente o de forma esporádica, os habréis dado cuenta de que las recetas que publico son de los mas sencillas, primero porque mis nociones de cocina son las de una persona que pone mas voluntad que grandes conocimientos, ilusión por hacerlo y simplemente el gusto por que la presentación sea lo mas apetecible posible, o al menos intentarlo. No debemos olvidar el dicho tan cierto que se come mas por los ojos que por la boca.
Por lo tanto os animo a que lo intentéis, cualquier persona que tenga ganas, puede hacerlo sin ningún problema.
Este postre de nombre rimbombante pero realmente sencillo de elaborar y delicioso, se puede hacer con cualquier fruto rojo, manzana, melocotón, etc.etc.
Siempre que me es posible intento consumir productos de temporada, primero porque son mucho mas gustosos y segundo porque el precio es mas asequible, por lo tanto me he decantado por unas fresas estupendas, no muy grandes de tamaño pero muy dulces. También he utilizado unos frutos rojos que tenía en el congelador. Cómo van horneadas y pierden jugos, las fresas frescas han quedado mas enteras, pero muy sabrosas, de esta manera hemos conseguido que las frutas congeladas aporten mas jugosidad y las frescas mas sabor.
Fijaros en esta instantánea, que jugoso ha quedado.
Ingredientes para 4 personas:
200 grs de frutos rojos (se pueden utilizar congelados)
150 ml. de leche
150 ml. nata líquida
5 huevos
100 grs harina
125 grs azúcar lustre
mantequilla para untar los recipientes
Precisaremos 4 recipientes que puedan ir al horno
Elaboración
Mezclar los huevos con 100 grs azúcar, añadir la harina y remover hasta obtener una pasta homogénea. Calentar la leche en un cazo y añadirla a la mezcla sin parar de remover y finalmente, incorporar la nata liquida.
A continuación untar con mantequilla cuatro moldes individuales de barro o cerámica que se puedan poner en el horno. Espolvorear con el azúcar restante y verter la mezcla.
Añadir las frutas elegidas (si son frescas cortarlas en trocitos) y si son congeladas ponerlas directamente del congelador. Cocinarlo en el horno, previamente calentado a 180 grados durante 35 minutos.
Una vez hechos puedes consumirlo tibio o esperar a que se enfríen y servirlos decorados con el azúcar lustre.
Estaba rico... rico...
mmmm, me encanta esta version, me encanta!!!
ResponderEliminarme hice tu seguidora :-)
me gustaria tener estos recipientes, para poder hacer el pastel individual, como yu
felicidades, de mi parte un 10
un beso